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¿Les gustan las toronjas (pomelos)? Entonces guarden esas pieles para el consejo de hoy. La piel de las toronjas es rica en fibra y contienen aceites esenciales, fitoquímicos y vitamina C, que ofrecen protección antioxidante. Los extractos de la piel de la toronja pueden inhibir la propagación de las células cancerosas. Pueden ayudar a disminuir la irritación y la ronquera de la garganta causadas por la tos. Además, fortalecen el sistema inmunitario, lo que ayuda a combatir enfermedades comunes como resfriados, gripe e infecciones. La piel de la toronja confitada pueden comerse sola o utilizarse en repostería. Para su preparación, cocinen a fuego lento la cáscara de dos toronjas rojas grandes en 250 gramos (1 taza) de azúcar durante aproximadamente una hora. Debido al grosor de la piel, los caramelos quedarán gordos y masticables.
